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TEMA 1: Debate de los valores
Selección de material

Sto. Tomás de Aquino (1225-1274)
T 1/19 La razón conduce al hombre al fin
"El hombre tiene un fin al que tienden naturalmente su vida y su conducta, supuesto que dotado de razón,
siempre es por ella dirigido, sin que jamás obre sin fin determinado. A él, llegan los hombres por diversos
caminos, y así lo acredita la diferencia de sus inclinaciones y conducta. El hombre tiene por consiguiente
necesidad de un agente que lo dirija a su fin, y por eso, y para eso, le ha sido infundida la luz de la razón.“
(Sto. TOMÁS d. A. El gobierno monárquico1, I, 1, p.3)
T 1/20 Naturaleza y límites del gobierno de los reyes
"Esto mismo es lo que sucede en la naturaleza, la cual hace lo mejor en todas las cosas, procediendo en su
régimen ordinario en virtud de un solo principio. Entre la multitud de miembros que componen nuestro
organismo, hay uno solo que da movimiento a los demás, el corazón, y entre las facultades del alma, hay
una fuerza que dirige principalmente a las demás, la razón. . Y así es necesario conocer, que el gobierno de
uno solo es mejor para la sociedad." (Sto. TOMÁS d. A. El gobierno monárquico, I, 2, pp. 14-15)
T 1/21

"Pero supuesto que como antes hemos dicho, el hombre es un animal sociable por naturaleza, que vive en
sociedad; la semejanza del gobierno divino con el gobierno del hombre, no consiste en que un hombre sea
dirigido por la razón, sino en que la sociedad sea gobernada por la razón de un hombre. Este es el principal
atributo de la majestad real. .
Sepan los reyes, que si están en el trono a que subieron, es para ser en sus Estados lo que el alma es en el
cuerpo, lo que Dios es en el mundo; porque si bien lo meditan, se sentirán abrasados de celo por la justicia,
pues que para administrarla fueron elevados, haciendo las veces de Dios.”(Sto. TOMÁS d. A. El gobierno
monárquico, I, 12, pp. 79-80)
T 1/22 El derecho natural y la justicia están por encima de los que ostentan el poder

"Debe, en cambio, obedecer a otro hombre respecto a los actos externos y corporales. De los cuales todavía
se excluyen los actos que interesan especialmente a la naturaleza del cuerpo, en lo cual también debe
obedecerse sólo a Dios, porque todos los hombres son iguales en su naturaleza; por ejemplo, en los actos de
sustentación del propio cuerpo y en los de generación de la prole. Síguese de aquí que ni los criados a los
dueños deben obedecer, ni los hijos a los padres, en lo tocante a contraer matrimonio o guardar virginidad
y en otros asuntos semejantes. . El hombre debe obedecer al poder secular en tanto le exija el orden de la
justicia. Por consiguiente, los súbditos pueden desobedecer cuando el poder es ilegítimo o manda cosas
injustas exceptuados algunos casos para evitar escándalo o algún mal mayor." (Sto. TOMÁS d. A. Suma
Teológica2, II, II, 104-106, pp. 441-442)
1 Sto. Tomás de Aquino. El gobierno monárquico. Imprenta D.A. Izquierdo. Sevilla, 1861. Traducción: León Carbonero 2 Sto. Tomás de Aquino. Suma Teológica. Edit. Biblioteca de Autores Cristianos, Tomo IX, Tratado de las virtudes sociales, 101-122. Madrid, 1955
T 1/23 El pueblo (la comunidad) tiene el derecho de oponer resistencia
"Más razonable parece que sea a la autoridad pública y no a la privada de cada uno, a quien competa
proceder en los casos en que el poder de los príncipes degenere en tiranía; porque si una sociedad tuviera el
derecho de darse un rey, no procedería con injusticia deponiéndole, o moderando su autoridad, si abusara
de ella de un modo tiránico; ni sería calificada de infiel destituyéndole, aun cuando se hubiera sometido
perpetuamente a él, porque conduciéndose como mal príncipe en el gobierno del Estado, debiendo
consagrarse a su bien y prosperidad como cumple a su misión, se hizo acreedor a que sus súbditos
rompieran el pacto que con él hicieron." (Sto. TOMÁS d. A. El gobierno monárquico, I, 6, pp. 36-37)
T 1/24 El papado tiene primacía sólo en el „Reino del espíritu”
".Como dice Jeremías (23,5):<Y reinará rey que será sabio.> Por consiguiente, de él procede y se deriva
el Sacerdocio Real. Pero aún hay más: todos los fieles de Cristo, en cuanto son miembros suyos, reciben
también el nombre de reyes y sacerdotes. La administración de este reino ha sido confiada a los Sacerdotes,
y no a los reyes de la tierra, para marcar la línea divisoria de lo espiritual y de lo temporal, designando
principalmente como jefe de todos, al Sumo Pontífice Pedro, y a sus sucesores los Vicarios de Jesucristo, a
quien todos los reyes de los pueblos cristianos deben estar sometidos, como al mismo Jesucristo."
(Sto.TOMÁS d. A. El gobierno monárquico, I, 14, pp. 91-92)

Source: http://www.eduvinet.de/comcult/pdf/wertedebatte/es/cocestmh106.pdf